Blog

Gestión de conflictos, mediación y promoción de la convivencia

la_confianza.jpg

La con…fianza, algo muy cotizado

Una vez más volvemos con situaciones de la vida cotidiana, los conflictos, que nos enseñan a poder ubicarnos de forma distinta en ellos. En esta ocasión hablaremos de algo que se queda en ocasiones “tocado y hundido”. O por el contrario, puede generar la oportunidad de fortalecer aquello que ya existía, hablaremos de la confianza.

La confianza en el proceso de mediación

Para aprovechar la situación de conflicto como algo productivo, debemos ser capaces de entender la confianza como una emoción positiva, vinculada a la felicidad. Es la base sobre la que se construyen las relaciones (sean cuáles sean), las interrelaciones, el respeto, la responsabilidad social, el amor, etc.

Dicho de otro modo, con la confianza, aumentamos la capacidad para relacionarnos y aumentamos la capacidad para resolver problemas.

La confianza es la seguridad que tenemos en otra persona, en algo o en uno mismo. Se hace consciente y voluntariamente, supone trabajo y esfuerzo conseguirla y mantenerla.

Gracias a esta seguridad, buscamos soluciones y aquí la confianza juega un papel muy importante, para vernos y ver al otro capaz de dejar de lado la rigidez, resentimientos y prejuicios. Conectar con lo humano y buscar los puntos de unión y valores compartidos.

Junto a todo esto, la sinceridad ocupa un lugar importante a la hora de confiar. Las personas percibimos si otro actúa con desconfianza, y suele terminar siendo algo mutuo en la relación. Sentirnos confiados con nosotros mismos y con el resto nos ayuda a saber expresar nuestras emociones y comunicarlas de la forma correcta. Aunque la tarea de expresar lo que pensamos y sentimos, no es tarea fácil.

Por ello y para generar confianza en los demás, es importante ser honesto y actuar de forma correcta, a la vez que hay que agradecer al que cumple las promesas. Para mantener la confianza debemos comprometernos y cumplir nosotros también con las promesas, pedir disculpas cuando no las cumplimos y sobre todo, aprender a perdonar los errores.

La confianza se puede romper, y es en esos momentos cuando resulta importante aprovechar la oportunidad para reconstruirla.

La confianza en el proceso de mediación, es poner la confianza en el cambio, en el otro, y en el profesional, también en el proceso. Es motivarnos, implicarnos y colaborar. Tener presente, la confianza en que podemos tomar decisiones y actuar con responsabilidad y compromiso. Las personas a medida que ven que avanzan con éxito, se sienten más confiadas consigo mismas, y con el otro, ya que gracias a la confianza se sienten valorados y respetados.

Fundación GizaguneLa con…fianza, algo muy cotizado
Share this post

Join the conversation

Related Posts